«…¡Ahora es tiempo de buscar al SEÑOR!» Oseas 10:12

Generalmente se admite que se debe buscar al SEÑOR; pero también se piensa que debe hacerse en algún momento futuro. Cualquier momento menos el presente: esa es la idea general. Pero es un error, pues la realidad es justo lo contrario: ¡el mejor momento para buscar al SEÑOR es el presente!

Considera que Cristo es el autor de tu ser; la fuente de la felicidad;el centro de la santidad; el dador de la gracia; y el juez de todos. Te encuentras alejado de Él, pero es muy posible que lo encuentres. No está lejos de ti. Se ha revelado en Jesús. Puedes encontrarlo en el trono de la gracia. Serás admitido en su presencia si vas en Su Nombre e invocas la preciosa Sangre de Jesús. Pero buscalo requiere fe, mediante la oración y con diligencia. Sin fe no lo encontraremos, porque «sin fe es imposible agradar a Dios, porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que él existe, y que sabe recompensar a quienes lo buscan», Hebreos 11:6

«Yo amo a los que me aman, y me hallan los que temprano me buscan» Prov.8:17. Muchos se han demorado demasiado; como las vírgenes insensatas cuando suplicaron la puerta ya estaba cerrada Mateo 25:10-12; y multitudes, en su lecho de muerte, lo han confesado y lamentado. Por lo tanto, busquemos al SEÑOR ahora mismo, mientras nos llama, mientras nos exhorta y advierte por Su Palabra, mientras da tiempo para el arrepentimiento. Pronto la puerta puede cerrarse. y SEÑOR podría jurar: «No entrarán en mi reposo». Pronto el Eterno podría decir: «Mi pueblo no escuchó mi voz, no quiso obedecerme, por eso los abandoné a la terquedad de su corazón…» Salmo 81:11.

«Es tiempo de buscar al SEÑOR», pues la enfermedad puede sobrevenirte; el pecado puede endurecerte; Satanás puede cegarte; el error puede engañarte; el mundo puede hechizarte; la muerte puede sorprenderte; ¡ Y Dios puede abandonarte! Ni un solo instante más allá del presente está asegurado para ti. «Ahora es el tiempo aceptable. He aquí, ahora es el día de salvación» 2 Corintios 6:2. Por lo tanto, «busquen al SEÑOR mientras puede ser hallado, llámenlo mientras está cercano» Isaías 55:6. Ningún momento es como el presente. No ignores esta advertencia de parte del SEÑOR.- James Smith

Oración final:

Señor, despierta mi corazón para buscarte hoy, sin demora, con fe y con sinceridad, y abre mis ojos para reconocerte mientras estás cercano y dispuesto a salvar.

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