«Tomen la Espada del Espíritu, que es la Palabra de Dios» Efesios 6:17

Aquí se expresa lo que necesita el creyente para vencer a Satanás y sus huestes: «Tomen la espada del Espíritu, que es la Palabra de Dios». Estamos luchando contra Satanás y sus demonios, Ef.6:10-12. Como cristianos, hemos recibido un recurso en Cristo; La Palabra de Dios, inspirada por Él mediante su Espíritu Santo, inspiró a los hombres a registrar sus palabras para comunicar su verdad: «Toda la Escritura es inspirada por Dios», 2 Tim.3.16, con ella somos literalmente bendecidos con toda bendición espiritual en los cielos.

La Palabra de Dios es una espada que libera las almas del reino de las tinieblas. Es una espada que penetra los corazones de los hombres, los abre, y les muestra su propio pecado y culpa ante un Dios santo. Sin duda es un arma de origen divino, un arma poderosa, eficaz y asombrosa, incomparable, inigualable en la mano de un creyente. Tan poderosa es que nada puede resistirla y nada puede vencerla. Ninguna palabra humana puede derrotar a las huestes espirituales de maldad, solo la Palabra de Dios. ¡El Espíritu Santo puede hacer que un hombre sienta el poder divino de la Palabra sagrada en lo más profundo de su ser!

La  Palabra de Dios es tan poderosa que trae la verdad al error, que puede traer felicidad a la tristeza. Es tan poderosa que trae luz a la oscuridad y te muestra el camino. Es tan poderosa que cambia la tristeza en alegría. Es tan poderosa que cambia el estancamiento en crecimiento. – J. Macarthur «Es tan poderosa que puede herir con un filo, el amor al pecado, y con el otro, el orgullo de la autojustificación. Es un arma conquistadora en todos los sentidos, esta maravillosa espada del Espíritu de Dios es tan poderosa, porque Él está en ella por eso es tan aguda y cortante». -Spurgeon

Para usar la Palabra eficazmente, debes entrar en la escuela del Espíritu Santo. Él debe tomar las cosas de Cristo y darnos su revelación. Él debe enseñarnos a empuñar esta Espada con fe y a sostenerla con vigilancia en oración, para detener la estocada del adversario.¡Estudia con constancia la Biblia, con oración y meditación! Profundiza la Palabra bajo la guía del Espíritu, memoriza versos que puedas usar en la lucha. Toma la Palabra con una fe sincera. Sujétala firmemente con un conocimiento más profundo. Y luego ejercítate a diario en su uso. Úsala para poder permanecer firme y resistir la tentación. Encuentra un texto de las Escrituras que hunda tu pecado hasta la médula, o que lo apuñale hasta el corazón.

Tus aflicciones se multiplican y nunca podrás vencer la impaciencia y la desconfianza excepto por la Palabra Infalible de Dios. Puedes soportar las pruebas con paciencia si usas esta arma para cortar y matar la ansiedad. Te mantendrás firme en el día malo y, habiéndo acabado todo seguirás en pie, si esta espada está en tu mente y en tu corazón. Por experiencia sé que dentro de mi ser Él ha dejado marcas de su destreza. Ha aniquilado mis dudas y temores, y no ha dejado más desconfianzas que me preocupen.¡Espíritu Santo, enséñanos ahora hazañas con esta arma, tu espada!- Spurgeon

«La Biblia es un arsenal de armas celestiales, un laboratorio de medicinas infalibles, una mina de riqueza inagotable. Es una guía para cada camino, un mapa para cada mar, una medicina para cada enfermedad y un bálsamo para cada herida. Si nos privan de nuestra Biblia, nuestro cielo perderá su sol». -Guthrie

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