El camino del SEÑOR es fortaleza al íntegro;  Pero es ruina a los que hacen maldad.  Proverbios 10:29

El camino del SEÑOR, es Cristo, Él es la vida y es el camino para llegar a la vida: "Me enseñas el camino de la vida" Sal.16:11 Y Él dijo de sí mismo: "Yo soy el camino, la verdad y la vida". Juan 14:6. Si buscas, pues, por dónde has de ir, acoge en ti a Cristo, porque Él es el camino: Este es el camino, anden por él. Isa.30:21  Adhiérete, pues, a Cristo, si quieres vivir seguro; es imposible que te desvíes, porque Él es el camino. Y los que en Él confían no se desvían, sino que van por el camino recto. "Les aseguro que el que cree en mí tendrá vida eterna" Juan 6:47.  -Ambrosio

Los caminos del SEÑOR son justos, benditos, y llevan a la bendición temporal, espiritual y eterna, a todos los que caminan en ellos. Sus caminos llevan a la justicia y al amor y deleite en la misma, y también a practicarla. En cuanto a los caminos de la maldad, de lo profano, del orgullo, de la hipocresía y la apostasía, no son los caminos de Dios. Son caminos de injusticia, y no traen más que maldiciones y problemas a los que caminan en ellos. Los que andan en estos caminos no están seguros, sino expuestos a los rayos del desagrado divino.

Pero los caminos de Dios refrescan el alma. ¡Dan al alma abundancia de refrigerio y dulzura! Si el alma está cansada y trabajada, los caminos del SEÑOR la refrescan; Si está muerta y endurecida, los caminos del SEÑOR la reviven; si está desfalleciendo, los caminos del SEÑOR la confortan. Los caminos del SEÑOR son trascendentes y superan a todos los demás. ¿Qué son las tinieblas comparadas con la luz? ¿Qué es la escoria comparada con el oro? Isaías 55:8-9 dice: "Porque mis pensamientos no son tus pensamientos, ni tus caminos mis caminos. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que tus caminos".

Los caminos del SEÑOR son afligidos, perseguidos, intrincados. Porque "estrecha es la puerta que lleva a la vida eterna", dice Mateo 7:14. La puerta se convierte en estrecha por las aflicciones, problemas y persecuciones. Caminemos pues, sin temor, intrépidamente hacia nuestro Redentor, Jesus; estaremos allí donde Él ha preparado moradas para sus humildes siervos, para que donde Él esté estemos también nosotros. Jn.14:3  Y para que conozcamos sus verdaderos planes, dice: "Padre, éste es mi deseo: que los que me confiaste estén conmigo, donde yo estoy y contemplen mi gloria"Jn. 17:24.

Los caminos de Dios fortalecen el alma. Confirman al de corazón recto, y lo fortalecen para soportar tentaciones y vencer corrupciones. Fuerte para regocijarse en la aflicción y cumplir con las obligaciones más divinas. Fuerte para mejorar las misericordias más espirituales. -Thomas Brooks

***********************************************************************************