NOVIEMBRE 28

"Guarda silencio ante el SEÑOR, y espera en Él". Salmo 37:7

La misericordia está más cercana cuando guardamos silencio bajo la vara de Dios. Consideren que la misericordia está más cercana, la liberación y la salvación están por llegar, cuando el cristiano se queda quieto o tranquilo y en silencio bajo sus mayores angustias y sus pruebas más dolorosas. El pueblo de Israel se encontraba en grandes aprietos. El faraón con un ejército poderoso estaba detrás, el Mar Rojo delante de ellos, montañas a cada lado de ellos y sin medios visibles para liberarlos. Pero entonces se quedan quietos para ver la salvación del Señor Ex.14:13-14, y en pocas horas sus enemigos son destruidos, y son gloriosamente liberados. David enmudeció o se mantuvo en silencio bajo grandes aflicciones. Sal. 39:9, encontramos que la misericordia y la obra de salvación se acercó a él . "Pacientemente esperé al SEÑOR, y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; puso mis pies sobre la peña, y enderezó mis pasos. Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios" Sal. 40:1-3.

Cuando Absalón hizo una gran conspiración contra David, sus súbditos disminuyeron y se vio forzado a huir para salvar su vida, mientras el espíritu de David estaba tranquilo y en calma. "Pero dijo el rey a Sadoc:Lleva el arca de Dios de regreso a la ciudad. Si el SEÑOR se digna verme con buenos ojos, me permitirá volver a ver el arca y su tabernáculo. Pero si él me dice que ya no soy de su agrado, entonces que haga de mí lo que mejor le parezca." 2 Sam.15:25-26. Y la misma calma y quietud de espíritu estaba sobre él cuando Simei lo maldijo amargamente y lo reprendió.2 Sam. 16:5-14. Y en pocos días, como pueden ver en los dos capítulos siguientes, los conspiradores fueron destruidos y el trono de David estaba más firmemente establecido.
La misericordia de Dios está siempre más cerca cuando el creyente tiene su propia alma en quietud. La salvación está por llegar cuando el cristiano guarda silencio y espera en Dios. La bondad amorosa cabalgará rápidamente para poner fin a las angustias de ese hombre que permanece en silencio en el día de sus penas y sufrimientos. ¡Ah, cristianos! Si quieren tener la misericordia cerca, si quieren ver el fin de sus aflicciones, si quieren obtener esa liberación que viene volando sobre las alas del viento, enmudezcan y guarden silencio ante el SEÑOR, bajo todas sus aflicciones.

Calla el niño delante de su padre, el súbdito delante de su príncipe, y el culpable delante del juez, cuando se levanta majestuosamente de su asiento del juicio y cambia su expresión en un aspecto de severidad, de modo que su sentencia cae sobre el ofensor con el mayor espanto. ¡Y no guardará silencio el cristiano delante de Dios Todopoderoso que paga a cada uno según lo que merezcan sus obras, y que no tendrá por inocente al culpable! Es más, calla la oveja delante del lobo, el ave delante del halcón, y todas las bestias del campo delante del león ¡Y no callaremos y guardaremos silencio delante de Aquel que es el León de la tribu de Judá! Apoc. 5:5. Dios es poderoso en fuerza, poderoso en consejo, poderoso en obrar, poderoso en amor y poderoso en castigar. Por tanto, guarda silencio ante el SEÑOR y espera en Él. -Thomas Brooks